domingo, 3 de junio de 2018

PRESENTACIÓN DE AIRES DEL SUR (TERCERA TANDA)

PRESENTACIÓN DE AIRES DEL SUR (TERCERA TANDA)
EXPO-LIBRO, 1 DE JUNIO 2018, 7,30 DE LA TARDE.

A CARGO DE MARÍA MAGDALENA CÁNOVAS MARTÍNEZ



Muy buenas tardes queridos amigos. Amigos porque ya nos conocemos algún tiempo, sobre todo en las presentaciones de las dos tandas anteriores de la serie Aires del Sur. Y queridos porque son ustedes incansables reincidentes y esto tiene un nombre: “amistad y querencia hacia el autor”



No voy a repetir las bondades de la escritura de Jesús Cánovas, mi querido hermano. Todos ustedes, los que lo han leído y repiten las conocen: su cruda  ironía caustica. La buena y sana ironía del que se ríe de sí mismo, de las circunstancias,  de la vida misma, de lo humano, aunque no ciertamente de lo divino. La ironía tremenda que hace escarnio de las debilidades de nuestra especie.   Sobre todo en esta tercera tanda de Aires del sur, donde la ironía se hace sutil, se vuelca sobre sí misma para reflexionar sobre ese ello profundo y misterioso que contiene la semilla de nuestra grandeza y también de nuestra ruindad.  Donde se esconden  al acecho las pasiones más bajas y también las nobles, como diría el gran Platón, aquellas  que nos hacen seres irracionales y las que nos llevan traspasar los límites de lo que somos y nos convierten  en el Animal Divino del que habla nuestro insigne filósofo del Materialismo Crítico Gustavo Bueno. No vivimos siendo, sino queriendo ser, vivimos siempre en camino hacia una meta  idealizada,  en camino de algo que se desea.

Por si hubiera entre nosotros alguien que no conoce a Jesús Cánovas, diré brevemente que tiene publicados 12 libros, 7 de poesía: A la Desnuda Vida Creciente de la Nada, del que tiene dos ediciones en Betania, Madrid, en el 1989 y en 1991 una segunda edición; Kirye Eleison, en Madrid Betania en el 1994; Estridularia, Murcia, Mirtya, 1999; La Luz Herida, Lorca, (Murcia) Espartaria 1999; Fanal de la Aventura, Águilas (Murcia) Hipocampo, 2000; Trasluminaciones y presencias, Murcia, Editora Regional, 2005; y, Otra vez la Luz, palomas, La sierpe y el Laúd (Colección Acanto), Cieza (Murcia) 2015; tiene publicados cinco libros de narrativa: Dulcísimas hebras de oro, (relatos), Murcia, Ediciones Tres Fronteras 2009; El Quinto Camino (Novela), Murcia Ediciones Tres Fronteras, 2016; Aires del Sur(primera tanda), (relatos), Murcia, Diego Marín Librero-Editor, 2017; Aires del Sur (segunda tanda) , (relatos), Murcia, Diego Marín Librero-Editor, 2017; y  Aires del Sur (tercera tanda) el libro que estamos presentando, publicado en Murcia, Diego Marín Librero-Editor, 2018. De las Revistas y Antologías que son muy numerosas no voy a decir nada.



Jesús con esta forma suya tan personal de escritura es capaz de aunar en un mismo párrafo, “nombres en “ico” y después transcribir un latinismo alquimista …su humor nace del aliento popular de la región, sus personajes son propiamente berlanguianos autóctonos, pícaros rurales y astutos lenguaraces”, a decir del crítico literario Antonio Ortega, al que le agradecemos su certera glosa.


Las peripecias vividas por estas gentes que desconocen sus límites y  se mueven escindidos, sufrientes y patéticos por los aledaños del esperpento, representan comportamientos arquetípicos surgidos del análisis filosófico-psicológico de las características humanas.








Aires del Sur (tercera tanda), está compuesto por cuatro relatos, “De Amicitia”, “Vida”, “Una experiencia paranormal”, y finalmente: “Diálogo hacia el final de la filosofía”.

De los cuatro libros o tandas, que componen la saga de Aires del Sur, ésta tercera entrega podemos decir  que es la que más se deleita en los abismos psicológicos de los personajes, algunos de los cuales rayan en la locura y el delirio, siendo muchos de ellos transversales en toda la saga de relatos: Grulí Mochuelar o Miguel Cagarrutio entre otros; así como los temas: La vida, la amistad,  sentido religioso, el hombre y la muerte. Todos ellos son temas de los que si realmente hiciéramos una profunda reflexión, seguramente nuestra vida sería quizá más feliz o simplemente distinta. La felicidad no está en las cosas sino en nosotros mismos en dialéctica con lo ilimitado, precisamente por nuestras limitaciones.

En estos relatos se entremezcla el análisis psicológico con la ironía de las situaciones cotidianas, haciendo que desde lo trágico surja la sonrisa profunda, sino la carcajada de nuestra propia pateticidad. Somos seres patéticos  y endiosados que nos sentimos libres cuando hacemos alguna maldad. En la naturaleza somos un forúnculo, y dentro la especie nuestro individualismo nos lleva a la propia extinción. Como individuos somos tan poca cosa frente a la naturaleza que estamos abocados a la tribu o sociedad como quieran llamarla. Pero eso sí, una tribu con identidad. La identidad es lo que nos hace únicos e importantes. Da mucho prestigio inventarse una identidad y pertenecer a ella; ya sea un grupo de senderismo, o literario, o una sociedad secreta, a voces claro, porque si no sabe nadie que pertenecemos a ella no tiene ninguna gracia.

El primer  relato, “De Amicitia”  habla de la amistad como necesidad humana. El protagonista que curiosamente se llama como el autor, hace un certero análisis fenomenológico del poeta “mediocre” representado como el Gnomo Sodomita, también conocido como el Detritus, al que hay que sumarle el arquetípico Trepario Retrepa o El poeta señorito, enfocándolos  desde el mundo literario. Rescata en este relato a Leopoldo, el amigo, el poeta, al que honran con el alboroque, práctica tradicional de este nuestro sureste cuando un amigo muere. 

Destacando  de esta forma la buena poesía de la mediocridad poética donde encontramos personajes tipo, como Miguel Cagarrutio, Excrementinis o Sarasates cualquiera entre otros no menos sarcásticos.

Las reflexiones del protagonista se suceden al hilo  de una cena típica de verano con amigos, bajo un hermoso cielo nocturno y la luna en su plenitud circundante. Describe con maestría y detalle un entorno bellísimo  cercano a  Cabo de Palos,  del que relata las peculiaridades  de sus montes y colinas, se recrea en la flora  y en los detalles mínimos de tal forma que el lector puede ubicarse con total precisión y gozar del lugar idílico.

Esta cena  nos recuerda  las comidas y cenas a las que Sócrates asistía como invitado de anfitriones  insignes y prestigiosos. En las cuales se discutían las cuestiones y temas candentes de la sociedad de aquella época, y, todo hay que decirlo, no se diferenciaban mucho de la temática de nuestra actualidad. La tertulia de la cena invita al lector a participar en la conversación; el lector se siente  como un contertulio más que tiene algo que decir en la sobremesa.

––¿Qué piensas de la amistad?
––¿Escribimos para ser reconocidos Jesús? ¿Por qué escribes?
––¿Cómo sería nuestra vida sin amigos? ¿Distingues entre amigos y conocidos?










––En el relato titulado “Vida” (Dedicado por cierto a una persona muy querida para ambos). El loco  pretende ser Dios.
––¿Qué piensas sobre la muerte?
––¿Es posible volver de la muerte?
––¿Por qué ese empeño a partir de Nietzsche en matar a Dios ?



“Una experiencia paranormal”,  es una hipérbole que se repite, leo literalmente:

 “Se suceden los días idénticos, uno detrás de otro; siempre idénticos. Aparece el valor rutinario de todo, el sentido fatuo de lo cotidiano, el desplazarse de acontecimientos y cosas para siempre decir lo mismo, para no decir nada… Me pesa esta rutina silenciosa, este túnel por el que he entrado y del que no vislumbro ninguna salida; todo es oscuridad aquí, muerte.”
Otro párrafo:

“Me levanto con Platón y me acuesto con Platón; Platón, Platón, Platón... Hay que repetirlo para que no se olvide, repetir a Platón, Platón, Platón... para que se fije en la memoria,… Mis clases consisten en la repetición de la muerte.
He vendido mi alma por unas pocas monedas, para, invariablemente, encontrar finalmente la melancolía… para darme de bruces con este ánimo sosegado desde el que contemplo el tránsito de las sombras, esas sombras que transitan por el mundo; mundo que es el conjunto de todas las sombras en tránsito, las sombras, las sombras que me hacen inmune y me insensibilizan al dolor”…

Experiencia paranormal es un  relato delicioso y clarificante que al hilo cartesiano de una clase de filosofía, sui generis (como suelen ser estas clases)  el profesor nos va  introduciendo en mundos posibles y nos relata las aventuras vividas junto al Pater Augustus, entre ellas una experiencia paranormal. Además constata cómo los mundos virtuales que están tan de moda en la actualidad  hace ya unos 2500 años Aristóteles  tenía una idea muy clara de ellos, de la “virtualidad”.
Si tenemos profesores entre el público enseguida reconocerán las características y vicisitudes de una clase.


––¿Sólo existe lo que vemos, tocamos y contamos? ¿Existen ad intra o ad extra nuestra realidades distintas?
––¿Acláranos una de las ideas que bullen en este diálogo, la educación actual nos convierte en sombras? ¿En seres oscuros? ¿en copias?









Esperpéntico y terrible el Diálogo hacia el final de la filosofía.  Este relato transcurre en una biblioteca infernal. Es un relato reflexivo a la par que delirante, leo literalmente:

Contemplo mi reflejo en uno de los grandes ventanales que dan a la noche. Un individuo de mediana edad, enfundado en una bata de cachemir, calza pantuflas azules de talón bajo; se halla sentado en un sillón barroco, de caoba y tafetán negro, estilo Luis XVI. Me mira estúpidamente. Su cara es vulgar, demacrada, encubierta por una barba poco cuidada que comienza a canear; como rasgo sobresaliente cabe señalar las dos bolsas que hay bajo sus pequeños ojos grises, ya que denotan una posible afición al alcohol. Ese individuo es chato, como si un puñetazo le hubiera hundido la nariz. Continuamente ha buscado enfrentarse consigo mismo, pero siempre ha terminado derrotado en el intento. ¿Cómo no podría dejar de serlo? Ha reducido y eliminado al máximo los estímulos externos que le distraen con el fin de ganar la transparencia de su ser, pero ha pagado un precio en exceso alto por tener una mente ágil y clara; un precio que no desea a las buenas gentes que se dejan llevar por comportamientos meramente mecánicos. Al contrastarse tan solo con las mínimas eventualidades que se pueden necesitar para la vida, con una reducción drástica de apremios, ha sondeado su propio abismo. Y ha sentido vértigo.

¿Por qué será que mienten los espejos?, se pregunta ese hombre extraño. Sus tersas láminas de cristal bajo el azogue no tienen fondo; únicamente son superficies pulimentadas que devuelven las imágenes, rotas, desfiguradas: fragmentos rotos de una identidad rota. Fragmentos… fragmentos… trozos de lo que ha sido o de lo que es, trozos en los cuales él apenas si se recuerda. Trozos rotos de sí que le llegan a la memoria, que reconoce y sospecha tienen algún significado, algo, trozos rotos que pululan y giran. Sabe que estos trozos también ansían, ellos como él, como él que no es sino fragmento, trozo o trazo de un enigmático e inmenso puzzle que enlaza todo lo que existe, no desaparecer, no anegarse, definitivos, en la nada”.


Aires del Sur (tercera tanda), tiene un magnífica portada conceptual que simboliza la biblioteca infernal, de ahí su color rojo fuego y el personaje frente a frente en un diálogo maldito. Enhorabuena a sus autores Daniel Plana y Antonio Campuzano por captar de una forma tan artística la esencia del relato.


Últimas preguntas:

––¿La locura es patrimonio de unos pocos afortunados o está en  la mayoría de las mentes?
––¿Hay algún loco que sea consciente de su locura?  Porque, ni locos ni cuerdos admiten serlo. ¿Dónde está la línea que los separa? ¿Quién tiene autoridad para señalar al loco del que no lo es? ¿Debemos fiarnos de los psicólos en este tema de la locura?
––¿Estaremos locos todos?
––¿La envidia, el odio, el resentimiento… nos pueden llevar a la locura?

Resta dar las gracias a los asistentes a Diego Marín, y al autor de Aires del Sur Jesús Cánovas que han hecho posible entre todos este acto.







Me resta pedir perdón a los que estuvieron y no están en las fotos, tema este ajeno a mi voluntad.


PUNTOS DE VENTA DE LAS DIVERSAS TANDAS AIRES DEL SUR:

EN MURCIA

 Las cuatro librerías de DIEGO MARÍN en Murcia:
                                   EXPO-LIBRO, Merced, 25, Murcia
                                   GONZÁLEZ PALENCIA, Merced, 25, Murcia
                                   ANTAÑO LIBROS, Puente Nuevo, 9, Murcia
                                   CENTRO DEL LIBRO EL TIRO,
Junto al Campus Universitario de Espinardo. Polígono El Tiro (parcela 78)

También se puede pedir por Internet a la Librería Diego Marín:

Libros de Jesús Cánovas Martínez (Catálogo Diego Marín)

           
Librería RAMÓN JIMÉNEZ, Salzillo, s/n, Soportales de la Catedral, Murcia.
            
EN CARTAGENA:

Librería LA MONTAÑA MÁGICA, Pintor Balaca, 34, Cartagena (Murcia)
            
EN ÁGUILAS:

Librería MANUEL GRIS, Conde de Aranda, 6, Águilas (Murcia).

EN LOS BELONES (CARTAGENA-LA MANGA):

Papelería YOYES

Si alguien desea algún ejemplar de AIRES DEL SUR de  cualquiera de estas tandas, firmado y dedicado, siempre puede ponerse en contacto conmigo, por chat o whatsapp, o en E-mail: mochuelagul@gmail.com





Ad astra per aspera.






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